Estas dos mujeres, privadas de la libertad en la ciudad de Bucaramanga, son un ejemplo de perseverancia. La forma en que ayudan a las demás, el esfuerzo que ponen día a día para seguir adelante y la alegría con la que nos reciben en cada visita son un aliciente más para nuestro trabajo.
http://www.vanguardia.com/santander/region/185397-la-vida-en-bucaramanga-luego-de-decidir-ser-mula-del-narcotrafico